Comunicado de la Asociación Socialismo 21
¡Detengamos la privatización y precarización de los puertos!
El conflicto social, sindical y político que recorre los puertos es todo un síntoma de las relaciones de fuerza entre las clases en estos momentos. Un verdadero síntoma de la profunda crisis de la UE y sus políticas de austeridad y precariedad con los trabajadores y las trabajadoras.
Para el gobierno de Rajoy , a pesar de los titulares ganados por su reciente Congreso, se trata de una verdadera prueba de fuego de sus capacidades para disciplinar a todo el mundo en sus planes de austeridad y unidad nacional.
El año 1997, la Comisión Europea decidió establecer la liberalización del sistema de contratación de los estibadores portuarios imponiendo la precariedad en todos los terrenos, tanto en los salarios como en las horas de trabajo, privatizando la contratación mediante la implantación de ETTs o empresas de trabajo temporal.
En diversos países europeos se ha tenido que cambiar la legislación con medidas contrarias a los derechos de los trabajadores y de los mismos sindicatos del sector, que han sido históricamente de los más fuertes. En Alemania se impuso por “consenso· entre empresarios y sindicatos. En Francia se abolió la licencia para trabajar que instauró un comité compuesto por empresarios y el sindicato CGT. En Noruega como en Bélgica los trabajadores resisten -como en España- a los planes de liquidación de sus conquistas.
En el año 2006, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea condenó al Estado Español a multas de 21 millones de euros por incumplimiento de la normativa. Desde el 11 de diciembre de 2014 se deben pagar 27.522 euros al día, como sanción, y otra multa coercitiva de 134.107,2 euros por día de retraso. Dichas sanciones solo se levantarán si el gobierno ejecuta sus dictados. Por ello el Consejo de Ministros del pasado viernes tenía previsto aprobar el real decreto-ley que iba a imponer las condiciones exigidas por la Unión Europea , decreto que luego debería ser aprobado por las Congreso de los Diputados.
En este momento, en España , la contratación en las empresas portuarias se realiza a través de sociedades de gestión controladas por los sindicatos que establecen registros laborales, determinan las plantillas y los turnos, con buenas condiciones salariales.
El decreto del gobierno es un ataque en profundidad contra las conquistas sociales de los portuarios. A ello se oponen los trabajadores representados por la Coordinadora Estatal de Trabajadores del Mar, que integra a CCOO, UGT y otros sindicatos. Las asambleas realizadas en los puertos establecieron la total oposición a la precarización del sector y aprobaron paros parciales, en horas impares, durante los próximos días.
La patronal del sector aún recuerda con temor la huelga de 2006, una huelga general que paralizó todos los puertos contra una amenaza de precarización similar . Entonces pararon todos los puertos de Europa. Hoy vuelven a temer por sus beneficios y con una economía dependiente del exterior se produzca el desabastecimientos de mercancías.
Recientemente la propuesta de huelga de los trabajadores portuarios españoles ha sido respaldada por el Consejo Internacional de Trabajadores Portuarios, que tiene prevista una reunión internacional de apoyo a nuestros portuarios que se efectuará en Algeciras (Cádiz) el día 21de febrero ; llegarán a esa localidad delegados sindicales de Europa, África, América y Oceanía.
La Internacional de los portuarios, además, ha amenazado directamente al gobierno español con solidarizarse con los puertos españoles llamando a la paralización y al retraso de la carga de las mercancías españolas.Las amenazas a los portuarios del Ministerio de Fomento de imponer servicios mínimos del 100% ha fracasado, porque en puertos como el de Barcelona, los pausados ritmos de trabajo están acumulado mercancías y deteniendo la actividad de cientos de camiones.
No a la desmovilización
El pasado miércoles 15 de febrero el Gobierno ha retrocedido y decidido volver a la negociación retirando el decreto por el momento. Se trata de una tregua momentánea. El peor error sería confiar en esta decisión de Rajoy .
El periodo de desmovilización social y político que hemos vivido desde las elecciones municipales, hasta ahora, lo ha sido con el cuento que era la hora de las urnas y no de la movilización. Las urnas arrojaron resultados contradictorios, dejaron en minoría al gobierno, pero las políticas de colaboración de unos o la política espectáculo de otros, ha prolongado la desmovilización sindical y política, de forma artificial.
La incapacidad del gobierno para aprobar los Presupuestos Generales del 2017 concentra sus problemas y, ha bastado la amenaza de una huelga de los portuarios para que el gobierno retroceda, pese al dictado de Bruselas y sus multas disciplinarias.
La actitud de los estibadores encarnan la esperanzan para que la clase obrera vuelva a levantar cabeza defendiendo sus derechos con dignidad . El retorno de las movilizaciones sociales se vuelva a poner encima de la mesa contra una Unión Europea que muestra su verdaderos objetivos “ favorecer con sus políticas a las multinacionales que acumular ganancias, a costa de disminuir el valor del trabajo y privatizando sectores económicos y servicios que son públicos.
La capacidad de lucha de los estibadores ha abierto un conflicto que podrá ser duro y prolongado. Por los intereses en juego, el gobierno no reparará en medios para manipular a la opinión publica con el objeto doblegar a los portuarios.
Por tanto, hoy más que nunca, es preciso impulsar la solidaridad plena con los portuarios , con todas las victimas de la política neoliberal, con los trabajadores y con las fuerzas sindicales. Ha llegado la hora que la izquierda tome conciencia lo que significa para nuestros pueblos la pertenencia a la UE y al euro. Esta más claro que el agua, la Europa intervenida por la Alemania del Euro es una maquina para imponer la liquidación de los derechos sociales y laborales por políticas de ajustes y recortes económicos.